¡Qué rico unos churros! A veces se nos antojan y no tenemos ningún puesto cerca para ir a conseguirlos, entonces te traemos una opción fácil y rápida para que los preparés en casa.
Además es otra idea para que antojés a tus amigas o vecinos y emprendás con la venta de comidas si es que algún día deseaste hacerlo. Este puede ser un buen inicio o la apertura de una nueva opción en tu menú.
Ingredientes:
500 g. de Maseca.
1/2 taza de leche entera.
Aceite de oliva.
Azúcar y sal al gusto.
Esencia de vainilla líquida.
Preparación:
En un tazón, vamos a mezclar la leche y le vamos a integrar una cucharadita de sal o la cantidad de tu preferencia y unas gotitas de vainilla a gusto.
Una vez lo hayamos movido, vamos a integrar cucharadas grandes de Maseca poco a poco y vamos mezclando evitando que nos queden grumos en la mezcla.
La consistencia ideal de nuestra masa es cremosa o más líquida de lo normal, esto para que nos permita agregarlo a la manga y formar los churros.
Cuando lo tengamos listo, añadimos poco a poco cantidades de nuestra mezcla en un sartén con el aceite caliente.
Tip: si no contás con una manga pastelera, podés utilizar una bolsa de plástico completamente limpia, agregás la mezcla de churros en ella y le hacés un hueco pequeñas en una de sus esquinas y así podés agregarlo poco a poco en el sartén.
Cuando los saqués del sartén, colocalos sobre una servilleta para eliminar su exceso de aceite y posteriormente, aún calientes, pasalos por un plato con azúcar para mejorar la experiencia de nuestros churros caseros. Este último paso puede ser opcional.